La otra actividad que llevamos a cabo en mi último mes de trabajo fue un Taller de Robótica al que nos dio acceso Mercedes, ¡cómo no!
Modificamos todo el horario, pidiendo favores a los compañeros/as, para conseguir tener con Julio y Paquita, los responsables del taller (de SESA, sistemas electrónicos), una jornada maratoniana de 9 a 14 horas. No estábamos muy tranquilas, son alumnos/as de primaria y pensábamos que no aguantarían tantas horas concentrados en lo mismo.
Los subestimamos, ¡como tantas veces, me temo!
Usando nuestra clase, la de informática y los pasillos, se creó una suma de sinergias que dio para una mañana y para más si hubiera hecho falta. Los ponentes estuvieron fantásticos, con una paciencia y una conexión con los chicos/as envidiable. Mis blogmas mantuvieron el tipo casi todo el tiempo. Yo, miraba, coordinaba, hacía callar o jaleaba, según los casos, y, sobre todo, disfrutaba mucho de lo que estaba viendo.
Contacté con los medios por si querían acercarse a cubrir el evento. Mi escuela es rural y pública, necesita con la máxima urgencia, ser publicitada, empoderada, visibilizada, dignificada en suma...
Vino la televisión comarcal. Nos dedicaron en su espacio de noticias al día siguiente un buen tiempo de reportaje. Aquí os dejo el pequeño homenaje que me dedicaron por mi próxima jubilación (el periodista y el cámara son viejos amigos, han cubierto varias de nuestras actividades y creyeron necesario despedirme con este cariño...).
Fue todo intenso, broche final de los grandes. Quedé satisfecha: lo había intentado hasta el último día...
Ahora estoy ya jubilada, tan, tan contenta que muchas veces siento punzadas de remordimiento. ¿Cómo es posible que alguien como yo, cuya vida era la escuela esté ahora tan tranquila sin ella?
Respuesta: Porque creo que he hecho lo que tenía que hacer. Es algo así como tener paz interior por el deber cumplido.
Durante 40 años he trabajado sin parar, y muchas veces sin pensar, pero ahora me doy cuenta de que siempre me ha guiado una meta: sacar lo mejor de cada uno de mis alumnos/as.
Por este orden estas han sido mis prioridades, mis armas, mis herramientas pedagógicas:
- Quererlos.
- Respetarlos.
- Ponerme en su lugar.
- Ser su "cazatalentos" (como acabo de oír en una conferencia por streamigng). Yo siempre lo he llamado "El efecto Pigmalión", o poner altas expectativas en ellos (lo que viene a ser lo mismo que respetarlos, claro).
Siguiendo con el símil del álbum "Huyendo conmigo de mí"...
Siguiendo con el símil del álbum "Huyendo conmigo de mí"...
Extracto de la letra de "Lo que sobra de mí" de Fito & Fitipaldis:
Tuve que aprender de nuevo a respirar,
De nuevo tuve que aprender.
Hice agujeros en la capa del disfraz de SuperMan
Que nunca me he querido poner.
..................................................
Sé que la próxima estación de nuevo me despido,
Y sé que nunca dije “adiós” convencido
Y complicarme me resulta muy sencillo
Igual que respirar...
Tuve que aprender de nuevo a respirar,
De nuevo tuve que aprender.
Hice agujeros en la capa del disfraz de SuperMan
Que nunca me he querido poner.
..................................................
Sé que la próxima estación de nuevo me despido,
Y sé que nunca dije “adiós” convencido
Y complicarme me resulta muy sencillo
Igual que respirar...
Es un ciclo cerrado, no me gusta dejar flecos, quizá es una manera (inteligente, no me digan que no) de no sufrir por ello.
Ahora se abre ante mí un imponente abanico de posibilidades que antes no podía desarrollar.. Ya saben, "complicarme me resulta muy sencillo".
Estoy feliz, me faltan horas para todo lo que tengo pensado... Una de ellas, por cierto, oír a Mercedes leer la tesis un día de estos...
Estoy feliz, me faltan horas para todo lo que tengo pensado... Una de ellas, por cierto, oír a Mercedes leer la tesis un día de estos...
¡Brindemos por ello, chin, chin!
Me encantan, los "Presuntos Implicados" de siempre...W.M.B.
ResponderEliminarSupongo que se refiere a mis chicos cuando habla de "Presuntos implicados", ¿a quién si no, verdad?
ResponderEliminarGracias por la visita y el comentario, querido amigo,