"PIES SOBRE LAS MESAS. YA NO BASTA CON REPETIR Y VOMITAR". JESÚS HERNÁNDEZ

lunes, 15 de septiembre de 2025

Tiempos modernos

 

Fotograma de la película de Chaplin "Tiempos modernos", estrenada en 1936.


Escrito a unos días de mi jubilación

Yo he descubierto, mejor dicho, he razonado ahora, a estas alturas de mi vida, lo

que me mueve a actuar. No es "la paz mundial" como dirían las mises, ni la educación

en abstracto, ni esas grandes frases que se oyen por doquier. Es, sencillamente,

educar a los 20 o 30 alumnos que me tocan cada año. Yo no puedo abarcar más, soy

finita en mi humanidad, me excede todo lo demás. Ahora sí, eso lo intento hacer con

todo mi empeño, porque para mí es la misión de mi vida. Dar herramientas al pueblo

llano para que se pueda defender de las tropelías a que se nos somete

continuamente, despertar su conciencia de individuo pleno de derechos y enseñarles

que esa es la única manera de dignificarse, de no ser alguien que trabaja apretando

tuercas, como en la película "Tiempos modernos"; de Chaplin, y llega a su casa y sigue

apretando tuercas, y de paso tragándose todo lo que dan en la tele.

Es nuestra obligación enseñar eso al alumnado, la más noble misión que existe, en

mi opinión, y en eso estamos, aunque como sabes, tendré que encontrar otra manera

de hacerlo prontamente...¡ainsss!!!!

domingo, 14 de septiembre de 2025

La primera escuela


Un concepto amplio este de LA PRIMERA ESCUELA que yo voy a abordar solo en estos dos sentidos:

- Si alguien me pregunta cómo se prepara el primer día del curso la noche anterior y todas las noches anteriores que en el mundo han sido, le remito a esta entrada en mi blog allá por el 2011: https://comoenmipiel.blogspot.com/2011/09/el-primer-dia.html

- Si alguien me pregunta qué debe tener SU PRIMERA ESCUELA para el docente que empieza, esta sería la lista de lo imprescindible:


1 -  UN/A DOCENTE ENTREGADO/A

Ya hablé de ello en este post -https://comoenmipiel.blogspot.com/2016/01/reflexiones-sobre-algunos-pagos.html- allá por el 2016 recordando a mi primer maestro.

Sin este componente fundamental, sin una persona al frente de esa escuela a quien le importe que su alumnado aprenda, no hay nada que hacer, o por lo menos nada importante.


2 -  UNA LECTURA DIARIA

Decía yo en ese post del 2016:  "No se olviden de leer diariamente a su alumnado; en primer lugar porque se lo merecen; en segundo lugar, porque es un derecho que les reconoce la ley".

(REAL DECRETO POR EL QUE SE ESTABLECEN LAS ENSEÑANZAS MÍNIMAS DE LA

EDUCACIÓN PRIMARIA

Artículo 6.

Competencias básicas.

4.  La lectura constituye un factor fundamental para el desarrollo de las competencias

básicas. Los centros, al organizar su práctica docente, deberán garantizar la incorporación

de un tiempo diario de lectura, no inferior a treinta minutos, a lo largo de todos los cursos de

la etapa.).

_______________________

El alumnado llega desde casa con diferentes grados de adquisición del lenguaje y, normalmente desempeñará mejor sus estudios cuanto mayor sea ese nivel de adquisición. Consideré siempre que mi primer deber era "llenarles de palabras para igualar". Porque yo venía de una familia deficiente en ese sentido, y había suplido esa deficiencia con los cuentos que me había contado mi padre desde siempre. De ahí había pasado a los libros y sido una de las primeras personas de la familia en ir a la universidad.

Al haberlo vivido en primera persona, sabía que era una herramienta poderosa, y que sería un engaño de maestra si no se la proporcionaba a mi alumnado.


3 -  UNA CONCIENCIA SOCIO-POLÍTICA

Esto es algo que no puede faltar en una PRIMERA ESCUELA. Muchas veces vendrá traída por los libros, otras por la disposición del/la docente a hacerles reflexionar sobre la vida que sucede a su alrededor.

EJEMPLOS: 

-- NORMAS DE CLASE o reflexión sobre las conductas apropiadas para una buena convivencia. Se sacan las agendas (que deben servir para muuuchoo más que para anotar deberes) y se debate en clase sobre normas, deberes y derechos de nuestra pequeña república independiente. Se vota y se llega a consensos, que serán mejor cumplidos cuanto más debatidos y razonados hayan sido.

-- ELECCIÓN DE DELEGADO/A: oportunidad de oro para iniciarlos en democracia. Se constituirá JUNTA ELECTORAL, se elaborará CENSO DE VOTANTES, se establecerá CALENDARIO, se llevarán a cabo las distintas CAMPAÑAS de los distintos CANDIDATOS/AS,  se invitará al ALCALDE/ESA de la localidad y a distintos CONCEJALES para que hablen de su función. Finalmente se fijarán las funciones del cargo y se procederá a su a la SOLEMNE VOTACIÓN. Todo ello grabado para hacer partícipes a las familias, todo ello reflejado en la radio y tv locales/regionales/provinciales... que previamente habremos convocado.

-- CONTACTO CON AUTORIDADES: Preguntaremos a los políticos cosas esenciales para nuestro devenir diario (PRESIDENTE DEL GOBIERNO, MINISTROS, DIPUTADOS, DELEGADOS PROVINCIALES,...) 


4 -  UNA ESCUELA ABIERTA AL MUNDO

Se aprovecharán las redes, la IA, los espacios de intercambios escolares nacionales e internacionales,... para interactuar en otros entornos diferentes (escuelas eTwinning, museos, ONGs, otras escuelas rurales o urbanas...).

Se participará en certámenes y concursos de todo tipo para los que nos sintamos mínimamente preparados, porque no importará el resultado sino lo provechoso del camino.


Esta y no otra es para mí LA PRIMERA ESCUELA, una donde la emoción de las primeras veces sea compartida entre todos/as, donde haya un objetivo común que no será otro que ser/hacer lo mejor posible cada cosa de cada momento. Si aplicamos esta máxima a nuestro día a día vamos a tener la escuela que queremos, una única y propia que habremos construido con el mejor material posible, nuestros alumnos/as.


miércoles, 12 de julio de 2023

El cartel de #LaContadoraDePeliculas

 Me ha llegado el cartel de La contadora de películas, un film basado en la novela del Premio Nacional de Literatura, Hernán Rivera Letelier, que acabé de leer hace unos días. La película se estrenará el 3 de noviembre de este año.

Me emocionó y me gustó mucho el libro, y ahora me pasa lo mismo con el cartel; les voy a explicar el porqué.

Resulta que cuando yo era pequeña tuve mi Cinema Paradiso y mi contador de películas personal. Entonces no existía internet y, en un pueblo insignificante, el cine era la mayor diversión.

Todos los domingos íbamos al cine mi padre, mi madre y yo (no hubo hermanos). Estaba situado en la parte baja del pueblo, con lo que la ida era llevadera, pero cuando terminaban las películas (sí, entonces eran dos) había que subir hasta mi casa, y yo tenía cinco o seis años nada más, y estaba cansada, y mimada... y mi padre siempre terminaba tomándome en brazos, diciéndole a mi madre (mucho más recta): "es que la chica está cojica".

Siempre mi padre y sus dotes para fabular...

Las películas sin él nunca fueron ya lo mismo. En aquel tiempo él era mi referencia para todo. Contaba, cuando ya era mayor, que mi curiosidad ante el cine era insaciable y que le daba codazos para que contestara mis preguntas, que se oían en el silencio de la sala y de las que se acordaba perfectamente.

Decía que mi pregunta preferida era: "¿Ese es bueno o malo?"

Yo recuerdo que sus respuestas eran crípticas; "A veces bueno, a veces malo" o "Depende" o "Ahora, bueno". 

Son preguntas que sigo haciéndome ahora sobre la gente y ... ¡cómo entiendo las respuestas de mi padre!

Nuestro género preferido era el de romanos, ¡cómo disfruté con Benhur, Cleopatra o Espartaco! Nos sabíamos trozos de diálogos de memoria; las escenas de la serpiente en Cleopatra, la de los leprosos en Benhur o la final de Espartaco quedarán para siempre en mis retinas.

Pero vamos al CARTEL..

Me ha emocionado profundamente porque, como este, el cine de mi pueblo también estaba iluminado así; destacaba entre todos los edificios porque esa era la intención, era nuestro Faro de Alejandría.

Mi padre, mi madre y yo, podríamos haber sido perfectamente ese matrimonio e hija que se ve en el cartel, con esa cara y ropas de domingo, con esa ilusión por explorar lo que en ese templo del celuloide se nos tiene preparado...



Nosotros no vivíamos en un pueblo minero del desierto de Atacama (Chile), sino en un secarral de pueblo español con muy pocos recursos y mucha ilusión por derrochar. Mi padre era generoso, me la daba a raudales, y yo nunca le agradeceré bastante aquella paciencia ante mis codazos, mis preguntas, mi curiosidad de niña pequeña a la que parece que no le bastaba con lo que había en la realidad. 
Mi padre hizo que las películas cobraran una dimensión universal, daba con ellas explicación a todas las cuestiones de la vida, cuestiones que yo he insistido en buscar después en los libros, pero...
... en un principio fue el cine, luego vino todo lo demás: los libros, la universidad, la vida (pálido reflejo de la gran pantalla).

Todo esto me ha traído el CARTEL...
... ¿y a ustedes? ¿Les recuerda su niñez, su adolescencia (ese sería todo un capítulo aparte)? 
¿En su madurez, el cine les sigue atrapando con la misma garra?
Les escucho...

domingo, 25 de junio de 2023

10 razones para leer #lacontadoradepeliculas


Se estrena pronto el film "La contadora de películas" basado en la novela homónima del Premio Nacional de Literatura chileno Hernán Rivera Letelier.

Se me pide que dé razones a los docentes para leerla este verano. Aquí van mis 10 razones.

 Leerla para...

SONREIR: "como en casa el dinero andaba a caballo y nosotros a pie..."

ASUMIR LA PROPIA IDENTIDAD: "en la familia éramos cinco hermanos. Cuatro hombres y yo [...]Andaba a pata pelada todo el santo día, fumaba a escondidas [...] y hasta había aprendido a mear parada. Se mea parada, se orina acuclillada [...]. Me costó lo mío acostumbrarme a orinar como las señoritas. Me costó más que aprender a leer."

OLVIDARSE EN EL TIEMPO, PERDERSE EN LA AVENTURA: "Mis hermanos imitaban a la perfección el caminar arqueado y la mirada oblicua de John Wayne, el rictus despectivo de Humphrey Bogart [...]. Yo los mataba de risa al tratar de batir las pestañas a lo Marilyn Monroe, o de imitar los mohines inocentes -voluptuosamente inocentes- de Brigitte Bardot."

ENVOLVERSE EN LA MAGIA DE LAS PALABRAS: "El atardecer era para mí la hora más bonita de la pampa. Los últimos rayos del sol pintaban de oro el óxido de las calaminas y los colores del crepúsculo hacían juego con los pañuelos de seda que usaba mi madre. Ella adoraba los pañuelos de seda."

ACCEDER A MUNDOS IMAGINARIOS: "A mí, la nave del cine en penumbra me causaba fascinación; me parecía una especie de caverna misteriosa secreta, siempre inexplorada. Al atravesar las pesadas cortinas de terciopelo me daba la ilusión de pasar del crudo mundo real a un maravilloso mundo mágico."

TOMAR CONCIENCIA SOCIAL: "Las casas del campamento, como todas las salitreras de la pampa, definían perfectamente las tres clases sociales imperantes: las casas de calamina de los obreros, las casas de adobe de los empleados y los lujosos chaleses de los gringos."

VIAJAR AL INTERIOR DE UNO MISMO: "Al final pasé a llamarme María Margarita, nombre que a mí, la verdad, nunca me gustó mucho: me sonaba a mansedumbre, a conformidad, a madre sumisa."

ABANDONARSE A LOS RÍTMOS: "Solía ocurrir que al Cojo Peliculero, como le decían al operador, se le confundieran los rollos [...] y viéramos el final por la mitad de la película. O el principio al final. O el medio al principio. Entonces todo se volvía una majamama y nadie entendía un carajo."

ENFRENTARSE A LOS MIEDOS: "... esos niños licenciosos [...] que iban al cine no a ver la película, sino a atracarle el bote a las niñas. [...] Una vez un barrabás de los más grandes, le sacó los calzones rosados a una niña, los hizo girar triunfalmente por sobre las cabezas y los lanzó al aire, y como la película estaba aburridísima, los espectadores, con gran alborozo, comenzaron a lanzárselos unos a otros. Yo no me dejaba. Aunque dijeran que me hacía la mosquita muerta [...] pero al cine yo iba a ver la película."

ACEPTAR LAS DIFERENCIAS PERSONALES: "Como pasaba con la mayoría de las niñas pampinas, aunque recién iba a cumplir los once años, tenía un cuerpo demasiado desarrollado para mi edad. Algunos hombres decían, con un brillo lúbrico en la mirada, que lo que hacía madurar antes de tiempo a las niñas pampinas era el salitre, no en vano era elogiado en todas las latitudes como el mejor abono natural del mundo."


... porque, ya saben, "estamos hechos del mismo material de los sueños" según Shakespeare en La tempestad, pero según Hada del cine, la protagonista de nuestra novela: "estamos hechos del mismo material que las películas".

¡Buen verano! ¡Felices lecturas!

miércoles, 19 de abril de 2023

¿Quién eres?

 ¿Quién eres?

- Estoy solo, quiero estar solo, busco la soledad y ella me encuentra. No quiero a nadie en mi rincón; lo estropearía todo, aunque fuese una mujer tan hermosa como tú.




- No he venido a acompañarte, soy yo la que necesita compañía; la de cualquiera, bien me podías servir tú.

-No voy a entablar una conversación contigo, así que ahórrate los trucos que tengas preparados. Estás sola, como yo, ¿y qué? FIN.

- Necesito el contacto con la gente, de hecho voy a casarme para estar segura de no encontrarme sola nunca más.

-....

- ¿No te parece un buen motivo para una boda?

-...

- No creas que me caso solo por eso. De hecho, he venido a este parque para repasar y afianzar mis otros motivos. Para decirlos en voz alta y observar la reacción de la otra persona.

-...

- Verás... está esa cosa de formar una familia. Yo soy yo y mis circunstancias, ¿qué sentido tiene que pase sola el resto de mis días? 

Ya, ya sé que me vas a decir que están los amigos, los amantes... que no es necesario atarse de esta manera a nadie, pero es que yo eso lo veo muy en el aire. Un contrato es un contrato, da entidad a la pareja, cuesta más romperlo, que ahora la gente rompe por nada, y yo no soy así, necesito un compañero de vida en el que apoyarme. No es que sea débil, tengo mi trabajo y mi futuro hecho, pero... ¿y el romanticismo? ¿Y ese alguien que te valora por encima de todas las demás? Para una vez que lo he encontrado, ¿no crees que debería aprovecharlo?

-...

-¡Eres imposible! ¿Crees que no sé que desprecias mis motivos? ¿Qué pasa, que tu madre se casó con tu padre por motivos más puros? Dime cuáles, de verdad que no encuentro otros...

-...

- No me vas a ayudar, eh? Vas a dejar que cometa este error yo solita, porque tú crees que es un error, ¿a que sí? Te lo veo en los ojos, me miras con lástima; no, con condescendencia. Crees que necesito que me valoren para saber que valgo y estar rodeada de gente porque sé que estoy sola. Tú eres un purista, todo negro o todo blanco, pero yo me muevo en las zonas oscuras y ¡¡necesito un marido que me saque de ellas!! Es lo más parecido que encuentro a un amante, a un psiquiatra, a un sacerdote...

-...



- Pues tu cara no me ofrece ninguna reacción, estás dejando que tome la decisión yo sola. Seguro que quieres que vuelva a mi casa, me quite este vestido y me vaya por ahí a encontrarme a mí misma. Es que los hombres sois así, egoístas por naturaleza, alaa, sin pensar en nadie, primero vuestras necesidades y segundo ¡vuestras necesidades!

-...

-No me debo casar, ¿verdad? A ti te va bien así. Eres libre estando contigo mismo.

-...

-¿Y si no logro llenar yo sola ese vacío que tengo dentro? Yo soy muy poco interesante, ¿sabes? ¿De qué voy a hablar conmigo misma? ¿Y si descubro, una detrás de otra, todas las cosas de mí que no me gustan? ¿Cómo voy a lidiar con eso? Si convivo, hablo, discuto o hago el amor con mi marido, doy largas al monstruo que llevo dentro.
¿A ti no te devora? ¿Cómo lo haces callar?

-... 
-...

- ... Ya veo..., te devora, te da dentelladas, zarpazos..., pero no quieres que nadie esté presente y vea tu derrota; eres un cobarde.

-...

-Sea cuál sea mi decisión, nunca la sabrás; hay otras formas de cobardía que yo aún no había contemplado. Estoy sola como tú, ¿y qué? FIN.



miércoles, 18 de enero de 2023

Las paredes hablan

 Si yo pudiera contar...

Si supiera...

Si me atreviera...

Si fuera Annie Ernaux , la última premio Nobel, contando, como ella en La mujer helada, mi vida de amante esposa y madre...

Pero... paremos un momento en esto último. Hagamos un poco de arqueología personal:

Cuando le conté a mi chico preferido del instituto que iba a hacer magisterio, también me dijo  : Un trabajo excelente "para una mujer", dieciocho horas de clase, el resto del tiempo en casa, un montón de vacaciones para ocuparse de los niños, todo un sueño, en definitiva un trabajo perfectamente indoloro para el entorno, mujer "realizada" que aporta dinero, sin dejar de ser una buena esposa y una buena madre, quién iba a quejarse.

Bueno, las palabras no fueron tan bonitas, pero recuerdo oírle decir que era el perfecto trabajo para una mujer. Estábamos a finales de los años 70. Lo digo por situarles.

En los 80, llegaron mi marido y mi primer hijo, y hoy, leyendo a la Ernaux me abofetea esta frase: La vida debía de ser aquello. Tenía veintiocho años.

Justo lo que yo sentí; un desencanto tan grande que derivó en un profunda depresión de la que me costó mucho salir.

Entonces yo no tenía .y ahora, tampoco- la facilidad de expresión de la escritora cuando dice: Lo conseguí y dar clase de lengua francesa a tres grupos y la compra y las comidas y coser cremalleras y comprarles zapatos a mis dos hijos. Qué hay de extraordinario en ello puesto que él (se refiere a su marido) me convence siempre, soy una privilegiada, tengo niñera cuatro días y medio a la semana... Entonces, qué hombre no es un privilegiado, con su mujer de la limpieza preferida siete días a la semana.

Con el tiempo, es lógico creer que las cosas han mejorado, y espero que sea así en muchos casos (yo

adoctriné e hice todas las huelgas y microfeminismos posibles), pero no puedo dejar de pensar, ahora que las paredes hablan, que me sentí y me siento como el niño yuntero de Miguel Hernández, como si las mujeres hubiéramos nacido con el cuello perseguido por el yugo para el cuello.

Que, como el toro, hemos nacido para el luto...

Mural 119


Que tengo que apartar la tierra cada día a dentelladas secas y calientes.


Pero no se confundan, como el toro nos crecemos en el castigo, y no vamos a consentir, por ejemplo, que los dictadores de turno nos digan cuándo debemos escuchar el latido fetal si decidimos abortar. Pasos atrás, ni uno. Porque para la libertad sangramos, luchamos y pervivimos, porque a fuerza de golpes, fuertes, mal que les pese.

Mural 85



Quizá les fueran de ayuda las paredes que hablan en Orihuela, en el barrio de San Isidro, el más pobre de la zona, donde artistas profesionales y amateurs plasmaron sus obras en 140 fachadas en honor a Miguel Hernández. Hoy es posible visitar este museo al aire libre, ampliado cada año, donde priman los murales con versos del poeta acompañados de ilustraciones al pie de la sierra de Orihuela.

Aquí les dejo algunos ejemplos:

“Nunca pierdas tu libertad”

2013

Entre la C/ Sauce y C/ San Isidro Labrador

Nunca pierdas tu libertad se representa con un retrato en blanco y negro cuyo intensos y bellos ojos hablan de la determinación de romper las cadenas, que metafóricamente crecen entre su denso cabello. Este mural es un canto a la libertad que ofrece León, grafitero oriolano de gran prestigio.

Mural 87


Mural 168




Mural 47


Como ven, a mí cada día me hablan estas paredes...


Dejadme la esperanza.



jueves, 17 de febrero de 2022

Mi patio de recreo

Esto es echar mucho la vista atrás, porque mi primer patio de recreo, el primero que yo recuerdo por lo menos, no era el de una escuela, era el de una casa de planta baja que habían alquilado mis dos maestros. Instalaron allí lo que pomposamente se llamó “Academia Esteve”, única manera que encontraron de trabajar al ser depurados por la guerra civil.

Era, como digo, una casa familiar, pero tenía al entrar una estancia bastante grande. Allí, sin división física alguna, recibíamos clase todos: a la derecha estudiábamos los pequeños, y a la izquierda, los mayores. Detrás había un patio y al fondo dos pequeñas habitaciones y un aseo. Eso era todo.

Cómo esos dos profesores lograban enseñar algo en ese babel que era la clase, es todavía un misterio para mí; quizá ahí empezó mi respeto por la profesión.



Esa indivisión, ese maremágnum de edades, sexo, altura y procedencia social, se reflejaba también en la hora del recreo.

Salíamos, todos a la vez, a lo que era el patio de la casa. Quizá fuera más grande que los patios al uso de la época, pero desde luego era insuficiente para albergar a todos los estudiantes.

Yo era de los pequeños, además siempre he sido (y sigo siendo) muy bajita para mi edad, así que me sentía como Gulliver en el país de Brobdingnag. 

No recuerdo haberlo pasado especialmente mal, solo recuerdo:

que el suelo era de cemento, 

que no había ni un solo árbol, 

que ningún juego estaba pintado en el piso, 

que el aseo estaba muy sucio, 

que todo el mundo era muy alto,

que el ruido era ensordecedor,

que yo me quería ir a mi casa,

que era más seguro sentarse en un rincón y no moverse de allí,

que a pesar de todo sobreviví,

que incluso llegó a gustarme la escuela,

que incluso me dediqué profesionalmente a ella, 

y que había un “culpable” de esto último: uno de mis maestros, 

que era todo bondad,

que quería a sus alumnos,

que tenía como meta en la vida que aprendieran, 

porque este maestro depurado sabía del valor liberador que puede tener la palabra,

porque sin conocer a Rodari puso en práctica su más famosa consigna:

"El uso total de la palabra para todos” me parece un buen lema, de bello sonido democrático. No para que todos sean artistas, sino para que nadie sea esclavo. (Gianni Rodari en Gramática de la fantasía).